Hay números emblemáticos, míticos, simbólicos. Lo es la camiseta con el dorsal 10. En el mundo, en la Argentina. Y en Boca, claro. Una casaca que no tiene dueño desde que la dejó vacante Carlos Tevez desde junio de 2021 cuando le puso una pausa a su carrera para irse de Brandsen 805. Entonces el 10 azul y oro se guardó.

Nadie lo agarró ni lo pidió. Tampoco ningún futbolista lo heredó. Incluso en una lista de Copa Libertadores el casillero quedó ausente.

"La camiseta 10 de Boca no es para cualquiera", fue uno de los últimos mensajes de Tevez antes de partir del club. Ni siquiera él, en su regreso de su polémica partida a China, la pudo recuperar rápido.

Es que en esa primera temporada lució el 32 en su espalda, con el colombiano Edwin Cardona como su compañero con el número de conductor de aquel equipo de Guillermo Barros Schelotto.

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FUENTE: CLARÍN