El cine Mendocino da un salto de calidad con "Los ojos del Buho"

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Cultura 25/07/2018 Nacho Tapia para espuma.com.ar
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El  cine en Mendoza crece a medida que pasan los años, por una parte por el avance de la tecnología que nos deja al alcance cámaras de buena calidad (dslr) y por otro lado gracias al aumento de instituciones especializadas en la enseñanza de esta profesión en la Escuela Regional Cuyo de Cine y Video, la primera en la provincia, seguida de la UNC y la Universidad J.A. Maza.

Hoy nos encontramos con muchos proyectos en marcha, como Los Ojos del Búho, una película independiente que está recorriendo un largo camino para su estreno. Hablamos con su director, Javier Millán quien nos brindó un poco de información sobre su película y su perspectiva del cine mendocino.

En un breve resumen ¿de qué trata la película?

La peli es un Thriller psicológico donde, desde el guión hemos escondido un poco la víctima, pero también al victimario y la trama se cruza con varias posibilidades de quién puede haber matado a quién. El argumento es un director de cine que vuelve a rodar un largometraje de bajo presupuesto y entre los personajes se va creando una posible causa de asesinato, una venganza, celos, persecutas psicológicas y llevan situaciones posibles de muerte. Hay un fiscal que, desde el inicio (mediante el recurso del flashback), nos va dilucidando qué puede haber pasado. Obviamente antes del finnal se esclarece todo, tanto el motivo como el ejecutor y la víctima.

¿De dónde surge la inspiración para esta trama?

Generalmente las tramas se me ocurren de cosas cotidianas que voy exprimiendo y enroscando; en este caso salió de una situación que una actriz, con las manos manchadas de sangre y algo en shock, empezaba a gritar “¡corten!”, porque no sabía si estaba, o no, en un rodaje. Esa sola escena, que salió de un “imaginate si…”, empezó a disparar situaciones de cómo llegaba ella ahí y cuando quise acordar…tenía una historia para contar.

¿Por qué se decidieron por una producción independiente y no por un subsidio del INCAA u otro ente estatal?

Hacerlo de manera independiente fue gracias a uno de los actores del elenco. La cosa es que el INCAA dijo que este año no se van a dar subsidios (o algo así), y como le apostamos mucho a esta historia y tenemos un equipo técnico y artístico que realmente lo vale, dijimos que nos merecíamos esta oportunidad de hacerlo. Así, fue más fácil charlar con gente para una inversión privada que meterse en la cola de un INCAA que no piensa dar un peso.

¿Qué dificultades y libertades les ha traído el ser independientes?

Las dificultades son siempre económicas. Gracias a algún dios, mi profe de dirección entró el primer día al curso y, sin presentarse dijo: hacer una película, es solucionar problemas. Así que traslados, coordinación de actores, la producción que consigue locaciones y atrezos, son todos problemas superables. Nos quedaba el tema de la plata para actores y técnicos pero pudimos salir a rodar porque encontramos gente que nos cree, y ahí estamos, avanzando.

¿Cuándo comenzaron con este proyecto?

Los ojos del Búho la comencé a escribir en Diciembre del ’16. Hicimos la prueba de actores, a los que conocía de antes (a casi todos) y sabía que se la bancaban. Realizamos la primer lectura de mesa en Septiembre del ’17 y empezamos a rodar en Diciembre, ya llevamos nuestro primer añito de laburo y creo que vamos muy bien.

Acerca de vos (Javier Millán) ¿Cuáles fueron los comienzos de tu carrera cinematográfica?

Yo estudié en Baires, hice por aquellos pagos un par de mediometrajes. Acá en Mendoza no hice casi nada mío. Doy clases de guión y al final filmamos los cortos de los alumnos y cerramos con festivales, ahí sí laburé mucho, llevo filmados (y editados)  96 cortos desde el 2005 que empezamos con ese proyecto, al que tengo medio abandonado. Sí pude hacer (pudimos) una miniserie en canal 9 en el 2010, se llamó Pasos en la noche, fue de 4 capítulos y fue realmente una odisea rodarla pero volvería a hacerlo.

¿Cómo ves el desarrollo cinematográfico en la provincia?

El desarrollo del cine en Mendoza ha crecido zarpado. Lo que critico cada vez que puedo es que hay mucho celo en el ambiente, yo venía de baires en donde, los directores se ayudan mucho, los guionistas discuten ideas, las cuentan abiertamente y aportan, se prestan fierros y ayudan en los rodajes de otros. Acá eso no se ve, es una pena, porque no somos muchos y como dijo una zarpada actriz de acá: “en Mendoza está la ley de la ligustrina, una ramita que se asome, vienen los demás y la tienen que cortar”. Y es una gran verdad; en vez de ayudar acá te destrozan, se consume porquería de baires, pero si es de acá, es malo, está mal realizado, etc. Lo bueno que se está haciendo es que se está rodando y mucho, aunque sea cada uno en su isla, ¡pero se hace! Me quedo con eso.

Los Ojos del Búho continúa en su etapa de rodaje, a la cual le sigue la etapa de post producción y luego su estreno. Esperamos continúen por buen camino y podamos ver el estreno todos contentos.

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