Perrita maltratada se niega a dejar su esquina y solo mira la pared tras ser rescatada

Siempre sorprende cómo un perro es capaz de amar a su dueño incondicionalmente, a pesar de ser maltratado, su lealtad no conoce límites.

Para Angel, una mezcla de galgo, afortunadamente fue rescatada de su hogar, en el que el amor brillaba por su ausencia y solo había maltrato, lo que le provocó un daño psicológico severo que hizo que se cerrara por completo.

El personal de PAWS Animal Rescue de Irlanda la llevó a su centro, donde le dieron una cama caliente, comida y le trataron la sarna que sufría debido a a la vida descuidada que había llevado.

Pero desde el principio estaba claro que esta hermosa perrita había perdido toda su confianza en las personas. Se negaba a mirar al personal y elegía quedarse en la esquina de su perrera, de cara a la pared, con la cabeza gacha.

El personal le dejaba comida, pero ella solo se la comía cuando no había nadie más. Tras ser examinada, determinaron que Angel sufría un caso extremo de ansiedad después de años de abuso.

Pero estos héroes de animales fueron pacientes, y poco a poco la perrita fue saliendo de su caparazón, especialmente cuando le presentaron a otro galgo.

Angel finalmente se dio cuenta de que estaba a salvo y entre amigos y comenzó a interactuar con el personal, y a disfrutar de muchas conversaciones aullando con su nuevo amigo peludo.

Una pareja, que acababa de perder a sus dos perros, decidió adoptar a los dos galgos, y ahora los perritos han llegado a un hogar lleno de amor y todos los juguetes que podían desear, algo que Angel claramente nunca había experimentado antes.

FUENTE: LA BIBLIA DE LOS ANIMALES